La mayor parte de la historia de la humanidad se ha ido definiendo mediante guerras y batallas. Por factores como el avance de la tecnología o el desarrollo de armas más letales y eficaces, durante el siglo XX se han producido las batallas más sangrientas que ha visto el mundo, con la Segunda Guerra Mundial como el conflicto con más bajas de la historia.
A pesar que siglos atrás la población mundial era mucho menor, en la Antigüedad se han producido también algunas batallas especialmente cruentas que dejaron cifras de muertos elevadísimas para la época. Entre ellas destaca la batalla de Changping, una campaña militar que tuvo lugar en torno al año 260 a.C. en China y donde murieron más de medio millón de personas, siendo considerada la mayor batalla de la Antigüedad.
La batalla de Changping se sitúa dentro del denominado Período de los Reinos Combatientes (Zhànguó Shídài), una época que abarcó aproximadamente dos siglos (entre el siglo V a.C y el siglo III a.C.) en el que los señores de siete estados de la antigua China alcanzaron un gran poder y comenzaron a considerarse como reyes, enfrentándose a otros señores de la guerra para aumentar su territorio. Los siete reinos combatientes que formaban China por entonces eran Qi, Chu, Yan, Han, Zhao, Wei y Qin. Fue también la época en la que comenzó a construirse la Gran Muralla China, tanto para protegerse de las tribus nómadas del norte, como para defender su reino de los estados vecinos.
En el año 265 a.C. el Estado de Qin invadió el Estado de Han para hacerse con el control de la prefectura de Shangdang (situada en la actual provincia de Shanxi).
Este puesto de comandancia de Shangdang estaba situado estratégicamente cerca del Estado de Zhao, y su captura abriría una ruta para la invasión de Zhao. El ejército de Qin aisló esta prefectura de Shangdang del resto del Estado de Han, tomando el control de los caminos, carreteras principales y de las fortalezas situadas en las montañas de Taihang.
Ante la imposibilidad de hacer frente a esta invasión, Han ofreció el control de la prefectura al Estado de Zhao. Xiaocheng, rey de Zhao, envió a Lian Po, su mejor general, al mando de un gran ejército para asegurar este territorio estratégico frente a la invasión de Qin. En el año 262 a.C. el ejército de Zhao se encontró con el ejército de Qin (comandado por Wang He) en Changping, al sur de Shangdang.
En los primeros enfrentamientos, el ejército de Zhao sufrió varias derrotas menores frente a las fuerzas de Qin. Esta confrontación inicial le sirvió a Lian Po para evaluar al enemigo y decidió que la mejor forma de derrotarles era esperar a que se marcharan cuando agotaran sus suministros ya que Changping estaba mucho más alejado del territorio de Qin que del territorio de Zhao y le sería más complicado mantener un flujo constante de suministros para las tropas.
Lian Po mandó construir varias fortalezas en el verano del año 260 a.C. y se dispuso a esperar que Qin se marcharan de Changping, sin embargo las fuerzas de Qin no se marcharon e incluso llegaron a romper las defensas de Zhao, aunque no contaban con las tropas suficientes para conseguir la victoria. El conflicto comenzó a estancarse y alargarse en el tiempo.
En un cambio de estrategia, Qin envió agentes a los estados de Zhao y Han para difundir rumores de que el general Lian Po era demasiado cobarde para luchar. Las acusaciones surtieron efecto y el rey Xiaocheng de Zhao, cansado de la estrategia que estaba siguiendo Lian Po, decidió sustituirle por el general Zhao Kuo (hijo del respetado general Zhao She). El Estado de Qin también hizo cambios y reemplazó a Wang He por el general Bai Qi.
En julio del año 260 a.C. Zhao Kuo asumió el mando de un ejército reforzado que estaba formado por más de 400.000 hombres, atacando el campamento de Qin cerca de Changping.
Como respuesta, Bai Qi usó una estrategia militar conocida como táctica de tenaza o doble envolvimiento (movimiento de pinza) similar a la táctica militar que utilizaría Aníbal años después en la Batalla de Cannas del año 216 a.C., y que es considerada una de las mejores maniobras en un campo de batalla de toda la historia militar.
Parte del ejército de Qin se retiró a la fortaleza de Qin. Mientras las tropas de Zhao Kuo les perseguían, un contingente de Qin formado por 25.000 tropas de caballería y otros 5.000 soldados de caballería ligera con arcos y ballestas se colocaron en la retaguardia de Zhao Kuo para crear la trampa. Cuando el ejército de Zhao Kuo atacó la fortaleza de Qin, los 25.000 soldados a caballo de Qin les emboscaron cerrándoles en el centro, mientras tanto la caballería ligera rodeaba y atacaba la fortaleza.
Zhao Kuo quedó atrapado con el ejército dividido en dos y las líneas de suministro cortadas, encontrándose en la peor situación posible, no podía continuar su ataque pero tampoco podía regresar a su fortaleza. Bai Qi lanzó su contraataque y el ejército de Zhao se vio obligado a retirarse a un monte cercano donde se fortificaron esperando recibir ayuda.
Sin embargo esta ayuda para Zhao Kuo no llegaría nunca. La política exterior del Estado de Zhao había sido muy errática y cambiante durante los años anteriores, perdiendo casi todas las alianzas que tenía con varios de los Reinos Combatientes como Qi o Chu.
El Estado de Qin aprovechó esta debilidad y el rey Zhaoxiang movilizó tropas adicionales desde Henei (en al actual provincia de Henan), ordenando a todos los hombres mayores de 15 años a que fueran a Changping a reforzar el cerco. De esta forma, Qin juntó un enorme ejército formado por 550.000 hombres que asediaron la fortificación de Zhao y a sus tropas durante 46 días.
Tras quedarse sin comida y agua, en septiembre del año 260 a.C. el ejército de Zhao hizo varios intentos desesperados de romper las líneas enemigas y escapar del asedio. Todos fracasaron, y el general Zhao Kuo murió por las flechas de los arqueros en uno de los ataques, conduciendo sus mejores tropas. Poco después el ejército de Zhao finalmente se rindió.
Bai Qi ordenó que los soldados capturados fueran ejecutados, probablemente enterrados vivos. Se cree que el motivo de una medida tan drástica, fue que la población local era hostil al gobierno del Estado de Qin, y temía que los soldados capturados se rebelaran ayudados por los aldeanos. Se liberó a 240 de los soldados más jóvenes para que regresaran a Zhao y difundieran las noticias del terror que habían vivido enfrentándose a Qin.
Aunque las cifras de la batalla no se pueden saber con exactitud, se ha estimado una fuerza formada por 450.000 soldados por el ejército de Zhao, frente a las 550.000 hombres que conformaron el ejército de Qin. La batalla de Changping fue muy probablemente la mayor batalla de la antigüedad, tanto en número de tropas que tomaron parte en el combate como por el número de bajas.
Según Sima Qian (dinastía Han), uno de los primeros historiadores chinos y considerado el padre de la historiografía china, cerca de 450.000 soldados de Zhao fueron asesinados durante y después de la batalla. A estas bajas se suman los más de 150.000 soldados muertos del ejército de Qin, convirtiendo la batalla de Changping en una de las batallas más sangrientas de la historia, con cerca de 650.000 muertos.
Para hacerse una idea de la magnitud de la cifra, dos datos interesante: la población total de China en aquella época rondaba los 40 millones de personas; y la considerada batalla más sangrienta de la historia, la Batalla del Somme de 1916 durante la Primera Guerra Mundial, dejó un resultado de un millón de muertos entre ambos bandos.
Antes de la batalla de Changping, el Estado de Zhao había sido uno de los estados más poderosos de los Reinos Combatientes. Sin embargo tras la enorme derrota sufrida, Zhao nunca se recuperó, lo que permitió al Estado de Qin ganar dominio militar sobre el resto de estados. Pocas décadas después, en el año 221 a.C., Qin usaría este dominio para unificar China (con Qin como el origen del nombre) bajo el mandato del emperador Qin Shi Huang, dando comienzo así a la época de la China Imperial que duraría hasta 1912 con la caída de la dinastía Qing.
A pesar que siglos atrás la población mundial era mucho menor, en la Antigüedad se han producido también algunas batallas especialmente cruentas que dejaron cifras de muertos elevadísimas para la época. Entre ellas destaca la batalla de Changping, una campaña militar que tuvo lugar en torno al año 260 a.C. en China y donde murieron más de medio millón de personas, siendo considerada la mayor batalla de la Antigüedad.
La batalla de Changping se sitúa dentro del denominado Período de los Reinos Combatientes (Zhànguó Shídài), una época que abarcó aproximadamente dos siglos (entre el siglo V a.C y el siglo III a.C.) en el que los señores de siete estados de la antigua China alcanzaron un gran poder y comenzaron a considerarse como reyes, enfrentándose a otros señores de la guerra para aumentar su territorio. Los siete reinos combatientes que formaban China por entonces eran Qi, Chu, Yan, Han, Zhao, Wei y Qin. Fue también la época en la que comenzó a construirse la Gran Muralla China, tanto para protegerse de las tribus nómadas del norte, como para defender su reino de los estados vecinos.
En el año 265 a.C. el Estado de Qin invadió el Estado de Han para hacerse con el control de la prefectura de Shangdang (situada en la actual provincia de Shanxi).
Este puesto de comandancia de Shangdang estaba situado estratégicamente cerca del Estado de Zhao, y su captura abriría una ruta para la invasión de Zhao. El ejército de Qin aisló esta prefectura de Shangdang del resto del Estado de Han, tomando el control de los caminos, carreteras principales y de las fortalezas situadas en las montañas de Taihang.
Ante la imposibilidad de hacer frente a esta invasión, Han ofreció el control de la prefectura al Estado de Zhao. Xiaocheng, rey de Zhao, envió a Lian Po, su mejor general, al mando de un gran ejército para asegurar este territorio estratégico frente a la invasión de Qin. En el año 262 a.C. el ejército de Zhao se encontró con el ejército de Qin (comandado por Wang He) en Changping, al sur de Shangdang.
En los primeros enfrentamientos, el ejército de Zhao sufrió varias derrotas menores frente a las fuerzas de Qin. Esta confrontación inicial le sirvió a Lian Po para evaluar al enemigo y decidió que la mejor forma de derrotarles era esperar a que se marcharan cuando agotaran sus suministros ya que Changping estaba mucho más alejado del territorio de Qin que del territorio de Zhao y le sería más complicado mantener un flujo constante de suministros para las tropas.
Lian Po mandó construir varias fortalezas en el verano del año 260 a.C. y se dispuso a esperar que Qin se marcharan de Changping, sin embargo las fuerzas de Qin no se marcharon e incluso llegaron a romper las defensas de Zhao, aunque no contaban con las tropas suficientes para conseguir la victoria. El conflicto comenzó a estancarse y alargarse en el tiempo.
En un cambio de estrategia, Qin envió agentes a los estados de Zhao y Han para difundir rumores de que el general Lian Po era demasiado cobarde para luchar. Las acusaciones surtieron efecto y el rey Xiaocheng de Zhao, cansado de la estrategia que estaba siguiendo Lian Po, decidió sustituirle por el general Zhao Kuo (hijo del respetado general Zhao She). El Estado de Qin también hizo cambios y reemplazó a Wang He por el general Bai Qi.
En julio del año 260 a.C. Zhao Kuo asumió el mando de un ejército reforzado que estaba formado por más de 400.000 hombres, atacando el campamento de Qin cerca de Changping.
Como respuesta, Bai Qi usó una estrategia militar conocida como táctica de tenaza o doble envolvimiento (movimiento de pinza) similar a la táctica militar que utilizaría Aníbal años después en la Batalla de Cannas del año 216 a.C., y que es considerada una de las mejores maniobras en un campo de batalla de toda la historia militar.
Parte del ejército de Qin se retiró a la fortaleza de Qin. Mientras las tropas de Zhao Kuo les perseguían, un contingente de Qin formado por 25.000 tropas de caballería y otros 5.000 soldados de caballería ligera con arcos y ballestas se colocaron en la retaguardia de Zhao Kuo para crear la trampa. Cuando el ejército de Zhao Kuo atacó la fortaleza de Qin, los 25.000 soldados a caballo de Qin les emboscaron cerrándoles en el centro, mientras tanto la caballería ligera rodeaba y atacaba la fortaleza.
Zhao Kuo quedó atrapado con el ejército dividido en dos y las líneas de suministro cortadas, encontrándose en la peor situación posible, no podía continuar su ataque pero tampoco podía regresar a su fortaleza. Bai Qi lanzó su contraataque y el ejército de Zhao se vio obligado a retirarse a un monte cercano donde se fortificaron esperando recibir ayuda.
Sin embargo esta ayuda para Zhao Kuo no llegaría nunca. La política exterior del Estado de Zhao había sido muy errática y cambiante durante los años anteriores, perdiendo casi todas las alianzas que tenía con varios de los Reinos Combatientes como Qi o Chu.
El Estado de Qin aprovechó esta debilidad y el rey Zhaoxiang movilizó tropas adicionales desde Henei (en al actual provincia de Henan), ordenando a todos los hombres mayores de 15 años a que fueran a Changping a reforzar el cerco. De esta forma, Qin juntó un enorme ejército formado por 550.000 hombres que asediaron la fortificación de Zhao y a sus tropas durante 46 días.
Tras quedarse sin comida y agua, en septiembre del año 260 a.C. el ejército de Zhao hizo varios intentos desesperados de romper las líneas enemigas y escapar del asedio. Todos fracasaron, y el general Zhao Kuo murió por las flechas de los arqueros en uno de los ataques, conduciendo sus mejores tropas. Poco después el ejército de Zhao finalmente se rindió.
Bai Qi ordenó que los soldados capturados fueran ejecutados, probablemente enterrados vivos. Se cree que el motivo de una medida tan drástica, fue que la población local era hostil al gobierno del Estado de Qin, y temía que los soldados capturados se rebelaran ayudados por los aldeanos. Se liberó a 240 de los soldados más jóvenes para que regresaran a Zhao y difundieran las noticias del terror que habían vivido enfrentándose a Qin.
Aunque las cifras de la batalla no se pueden saber con exactitud, se ha estimado una fuerza formada por 450.000 soldados por el ejército de Zhao, frente a las 550.000 hombres que conformaron el ejército de Qin. La batalla de Changping fue muy probablemente la mayor batalla de la antigüedad, tanto en número de tropas que tomaron parte en el combate como por el número de bajas.
Según Sima Qian (dinastía Han), uno de los primeros historiadores chinos y considerado el padre de la historiografía china, cerca de 450.000 soldados de Zhao fueron asesinados durante y después de la batalla. A estas bajas se suman los más de 150.000 soldados muertos del ejército de Qin, convirtiendo la batalla de Changping en una de las batallas más sangrientas de la historia, con cerca de 650.000 muertos.
Para hacerse una idea de la magnitud de la cifra, dos datos interesante: la población total de China en aquella época rondaba los 40 millones de personas; y la considerada batalla más sangrienta de la historia, la Batalla del Somme de 1916 durante la Primera Guerra Mundial, dejó un resultado de un millón de muertos entre ambos bandos.
Antes de la batalla de Changping, el Estado de Zhao había sido uno de los estados más poderosos de los Reinos Combatientes. Sin embargo tras la enorme derrota sufrida, Zhao nunca se recuperó, lo que permitió al Estado de Qin ganar dominio militar sobre el resto de estados. Pocas décadas después, en el año 221 a.C., Qin usaría este dominio para unificar China (con Qin como el origen del nombre) bajo el mandato del emperador Qin Shi Huang, dando comienzo así a la época de la China Imperial que duraría hasta 1912 con la caída de la dinastía Qing.
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