Se estima que el origen de los primeros insectos se remonta a hace más de 400 millones de años, siendo el fósil más antiguo de un insecto, el de un Rhyniognatha, del periodo Devónico Superior. Estos animales son anteriores a los dinosaurios, y han sobrevivido hasta nuestros días siendo en la actualidad los insectos el grupo de animales con mayor diversidad del planeta, con más de un millón de especies identificadas.
Los insectos son además una de las especies más abundantes de la Tierra, formando en muchas ocasiones algunas de las mayores concentraciones de animales que se han podido observar. No es de extrañar el increíble dato de que existen cerca de 200 millones de insectos por cada ser humano.
A lo largo de tantos millones de años de existencia los insectos no han parado de evolucionar y cambiar, y aunque habitualmente se les suele asociar con animales pequeños, no siempre han sido así. Sus antepasados, los insectos prehistóricos que poblaron la tierra en otras épocas o períodos geológicos, tenian un tamaño por lo general, mucho mayor que la de los insectos actuales. La teoría más aceptada para explicar el gran tamaño de los insectos prehistóricos nos dice que se debe a que había mayor concentración de oxígeno en la atmósfera (un 30% frente al 21% actual), que ayudaba entre otras cosas a su metabolismo, permitiéndoles tener cuerpos más grandes.
El motivo de su desaparición es más discutido. Se cree que no solo pudo influir la reducción de oxígeno en la atmósfera, algunos científicos apuntan a que las aves, que comenzaron a crecer y expandirse a partir del Período Jurásico, fueron realmente las responsables de la desaparición de estos insectos prehistóricos gigantes.
En cualquier caso, con el tiempo se han encontrado un buen número de fósiles de insectos que vivieron hace millones de años, hallándose también algunas especies enormes. Sin duda, los mayores insectos que han existido en la Tierra:
Especie de hormiga alada gigante que vivió hace aproximadamente 50 millones de años en Norteamérica. Un fósil de un animal del mismo género, Titanomyrma giganteum, es la mayor hormiga que ha existido.
Las hormigas Titanomyrma macho podían alcanzar los 3 centímetros, mientras que las hormigas reina tenían un tamaño aún mayor, con 6 centímetros de cuerpo y una envergadura de alas de 15 centímetros. Aproximadamente el tamaño de un colibrí.
Gracias al buen estado de conservación de los fósiles hallados, se tiene bastante información sobre esta titánica hormiga. Las Titanomyrma giganteum no disponían de aguijón y probablemente rociaban con ácido a sus enemigos para defenderse o incluso para cazar ya que además de alimentarse de hojas, se cree que eran carnívoras y buenas cazadoras.
Las Aphthoroblattinas son un género extinto de cucarachas gigantes del Carbonífero (hace 300 millones de años) que habitaba en gran parte del planeta, ya que se han encontrado fósiles de esta especie en lugares tan dispares como Rusia, Estados Unidos o Inglaterra.
Este enorme insecto es la cucaracha más grande que se conoce, alcanzando una longitud de entre 40 y 50 centímetros y una anchura de más de 35 centímetros. Como comparación, la cucaracha de mayor tamaño en la actualidad es la especie Megaloblatta, existiendo especímenes de casi 10 centímetros, aunque la mayoría de especies de cucarachas tien hoy en día un tamaño habitualmente menor, de entre 3 y 5 centímetros.
Saurophthirus es género ya extinto de pulgas que podía alcanzar un gran tamaño, midiendo hasta 2,5 centímetros de largo.
Vivieron durante el Cretácico en Siberia y disponían de unas patas diseñadas para agarrarse a otros animales a los que probablemente parasitaban succionándoles sangre. Se cree que una de sus "victimas" habituales eran los pterosaurios.
Esta especie es la transición entre las pulgas primivitas y las pulgas actuales, de un tamaño mucho menor.
Con el nombre científico de Meganeura Monyi, se trata de una especie de libélula gigante que vivió hace 300 millones de años en el período Carbonífero. Tenía un tamaño realmente gigantesco, con un peso de más de 150 gramos y una envergadura de alas era de casi 80 centímetros, la Meganeura es el insecto de mayor tamaño que ha existido en la tierra.
El fósil de este animal hallado en 1940 en Estados Unidos, contiene el mayor ala de insecto jamás encontrada, pertenece a lo que se ha denominado Meganeura americana. Su largo y delgado cuerpo estaba formado por unos enormes ojos compuestos, unas fuertes mandíbulas y patas espinosas. La estructura de sus alas era más primitiva, y tenía cuatro apéndices al final del abdomen, en lugar de los dos que poseen las libélulas modernas.
Meganeura era un depredador, alimentándose de peces, anfibios y grandes invertebrados ya desde su fase de crecimiento. De adulto podía capturar grandes insectos voladores y pequeños anfibios y reptiles. A diferencia de las libélulas modernas, que atrapan a sus presas con las patas, se cree que este gigante del Carbonífero utilizaba sus grandes mandíbulas.
Los insectos son además una de las especies más abundantes de la Tierra, formando en muchas ocasiones algunas de las mayores concentraciones de animales que se han podido observar. No es de extrañar el increíble dato de que existen cerca de 200 millones de insectos por cada ser humano.
A lo largo de tantos millones de años de existencia los insectos no han parado de evolucionar y cambiar, y aunque habitualmente se les suele asociar con animales pequeños, no siempre han sido así. Sus antepasados, los insectos prehistóricos que poblaron la tierra en otras épocas o períodos geológicos, tenian un tamaño por lo general, mucho mayor que la de los insectos actuales. La teoría más aceptada para explicar el gran tamaño de los insectos prehistóricos nos dice que se debe a que había mayor concentración de oxígeno en la atmósfera (un 30% frente al 21% actual), que ayudaba entre otras cosas a su metabolismo, permitiéndoles tener cuerpos más grandes.
El motivo de su desaparición es más discutido. Se cree que no solo pudo influir la reducción de oxígeno en la atmósfera, algunos científicos apuntan a que las aves, que comenzaron a crecer y expandirse a partir del Período Jurásico, fueron realmente las responsables de la desaparición de estos insectos prehistóricos gigantes.
En cualquier caso, con el tiempo se han encontrado un buen número de fósiles de insectos que vivieron hace millones de años, hallándose también algunas especies enormes. Sin duda, los mayores insectos que han existido en la Tierra:
Titanomyrma
Especie de hormiga alada gigante que vivió hace aproximadamente 50 millones de años en Norteamérica. Un fósil de un animal del mismo género, Titanomyrma giganteum, es la mayor hormiga que ha existido.
Las hormigas Titanomyrma macho podían alcanzar los 3 centímetros, mientras que las hormigas reina tenían un tamaño aún mayor, con 6 centímetros de cuerpo y una envergadura de alas de 15 centímetros. Aproximadamente el tamaño de un colibrí.
Gracias al buen estado de conservación de los fósiles hallados, se tiene bastante información sobre esta titánica hormiga. Las Titanomyrma giganteum no disponían de aguijón y probablemente rociaban con ácido a sus enemigos para defenderse o incluso para cazar ya que además de alimentarse de hojas, se cree que eran carnívoras y buenas cazadoras.
Aphthoroblattina
Las Aphthoroblattinas son un género extinto de cucarachas gigantes del Carbonífero (hace 300 millones de años) que habitaba en gran parte del planeta, ya que se han encontrado fósiles de esta especie en lugares tan dispares como Rusia, Estados Unidos o Inglaterra.
Este enorme insecto es la cucaracha más grande que se conoce, alcanzando una longitud de entre 40 y 50 centímetros y una anchura de más de 35 centímetros. Como comparación, la cucaracha de mayor tamaño en la actualidad es la especie Megaloblatta, existiendo especímenes de casi 10 centímetros, aunque la mayoría de especies de cucarachas tien hoy en día un tamaño habitualmente menor, de entre 3 y 5 centímetros.
Saurophthirus
Saurophthirus es género ya extinto de pulgas que podía alcanzar un gran tamaño, midiendo hasta 2,5 centímetros de largo.
Vivieron durante el Cretácico en Siberia y disponían de unas patas diseñadas para agarrarse a otros animales a los que probablemente parasitaban succionándoles sangre. Se cree que una de sus "victimas" habituales eran los pterosaurios.
Esta especie es la transición entre las pulgas primivitas y las pulgas actuales, de un tamaño mucho menor.
Meganeura
Con el nombre científico de Meganeura Monyi, se trata de una especie de libélula gigante que vivió hace 300 millones de años en el período Carbonífero. Tenía un tamaño realmente gigantesco, con un peso de más de 150 gramos y una envergadura de alas era de casi 80 centímetros, la Meganeura es el insecto de mayor tamaño que ha existido en la tierra.
El fósil de este animal hallado en 1940 en Estados Unidos, contiene el mayor ala de insecto jamás encontrada, pertenece a lo que se ha denominado Meganeura americana. Su largo y delgado cuerpo estaba formado por unos enormes ojos compuestos, unas fuertes mandíbulas y patas espinosas. La estructura de sus alas era más primitiva, y tenía cuatro apéndices al final del abdomen, en lugar de los dos que poseen las libélulas modernas.
Meganeura era un depredador, alimentándose de peces, anfibios y grandes invertebrados ya desde su fase de crecimiento. De adulto podía capturar grandes insectos voladores y pequeños anfibios y reptiles. A diferencia de las libélulas modernas, que atrapan a sus presas con las patas, se cree que este gigante del Carbonífero utilizaba sus grandes mandíbulas.
muy buena informacion se agradece saludos
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