
La gran depresión que siguió al crack de la Bolsa de Nueva York de 1929 (Wall Street Crash 1929), es citado a menudo por los "survivalists" como un buen ejemplo de la necesidad de estar preparado por si el sistema colapsa.
Los orígenes del Survivalismo moderno se pueden situar en las políticas gubernamentales de países como Estados Unidos o Reino Unido tras la Segunda Guerra Mundial. Durante la Guerra Fría, los programas de defensa civil comenzaron a promover la construcción de refugios antinucleares públicos y de refugios personales. El pánico a una guerra nuclear estaba ya instalado en la población, alentado en muchos casos por los propios gobiernos, como en el documental de 1946 "Un mundo o ninguno", alertando a los ciudadanos de los peligros de una guerra atómica.

Algunos movimientos religiosos como la "Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días" comenzaron a pedir a sus miembros que almacenaran un año de comida y agua para ellos y sus familias (en la actualidad sugieren que se almacenen víveres para 3 meses).
Durante las siguientes décadas, el movimiento survivalista siguió creciendo y ganando adeptos. En la década de los 60, el escritor y político Harry Browne (llegó a ser candidato a Presidente de Estados Unidos por el Partido Libertario), comenzó a realizar seminarios sobre cómo sobrevivir a un colapso monetario. En sus charlas, se asoció con Don Stephens (conocido arquitecto y diseñador de hogares ecológicos y autosuficientes), quien daba información sobre construir y equipar un refugio de supervivencia en lugares apartados o remotos. La historia del survivalismo en realidad acababa de empezar.

Ruff defiende en su libro la importancia de acumular metales preciosos como oro o plata, por su valor intrínseco, en caso de un posible colapso del sistema, frente a la denominada "moneda fíat" (dinero fiduciario, basado en la confianza y con respaldo legal).
Poco después, se publicarían numerosas guías, manuales y libros sobre supervivencia. Una de las más exitosas fue la revista "The Survivor", publicada por Kurt Saxon durante varios años y con la que se acuñó el término "survivalismo" para definir al movimiento. Al acabar la década el movimiento survivalista no paraba de crecer, llegando también a la primigenia red Usenet, donde se compartía información a través de foros y popularizándose posteriormente gracias a películas post-apocalípticas como Mad Max.

Publicados a principios de la década de los 80, una época de gran tensión entre las dos grandes superpotencias (Estados Unidos y la Unión Soviética), estos libros influyeron decisivamente en el movimiento survivalista, orientando los preparativos a la supervivencia en caso de una guerra nuclear y al retiro en un entorno rural de autosuficiencia ante un eventual y drástico cambio de estilo de vida.
Fue a partir de los 90 cuando se comenzó a usar el término "Preppers" (preparados) para definir a los integrantes del movimiento en la conocida como "segunda ola" del survivalismo. En 1999 el interés por el movimiento alcanzaría su máximo apogeo por los temores al problema informático del año 2000 (Efecto 2000)

Con la llegada del siglo XXI, el movimiento survivalista tendría un nuevo repunte de popularidad, conocido como la tercera ola del survivalismo, y llegando hasta la actualidad. Sucesos como los atentados del 11 de septiembre de 2001 en Nueva York, los desastres ambientales, la gripe aviar, el cambio climático global, el huracán Katrina o el terremoto y Tsunami del océano Índico de 2004, influyeron enormemente en la población. Muchas personas comenzaron a considerar que estar preparados ante un cataclismo es algo primordial, siendo necesario almacenar suministros, adquirir habilidades útiles y estar en contacto con personas de ideas afines para aprender lo máximo posible.
Tras la crisis de las hipotecas subprime en Estados Unidos en 2007 y la posterior crisis financiera y económica que desencadenó en todo el mundo, a partir de 2008 se publicaron numerosos libros ofreciendo consejos de supervivencia ante desastres potenciales, desde una escasez de energía y alimentos hasta el terrorismo nuclear o biológico.

Uno de los archivos más importantes de la red, es el sitio textfiles.com, creado por Jason Scott en 1998 y donde se recopilan miles de documentos, con un apartado específico dedicado al survivalismo compuesto por artículos e información que circulaba por la red Usenet originalmente: Textfiles - Survivalism
El movimiento survivalista en la actualidad, en realidad no es homogéneo, ya que los diversos grupos o individuos adheridos tienen diferentes mentalidades y formas de abordar los problemas, aunque con un nexo común: estar preparados ante un eventual colapso del sistema o un gran cataclismo.

Preparación para la seguridad - gente que cree en la viabilidad a largo plazo de la civilización occidental, pero que se prepara para sobrevivir a situaciones potencialmente mortales que pueden ocurrir en cualquier momento. Desde la preparación contra incendios e inundaciones a mordeduras de serpientes o ataques de oso.
Supervivencia en la naturaleza - preparándose para sobrevivir durante un largo período en un escenario de vida salvaje.
Desastres naturales - invirtiendo en construir y fortificar estructuras y refugios temporales, almacenando agua, víveres, medicamentos y combustible, tanto para un desastre natural breve como un huracán o terremotos, como para desastres naturales prolongados o incluso multigeneracionales.

Autodefensa - este grupo se centra en sobrevivir a posibles encuentros violentos, aprendiendo sobre el manejo de todo tipo de armas, artes marciales y tácticas de autodefensa.
Desastre monetario - ante un colapso del papel moneda, acumulando oro, plata y metales preciosos.
Bíblico - compuesto por los creyentes de diferentes religiones ante la llegada del Fin de los Tiempos o el Apocalípsis.
Peak oil - Este grupo cree que en la necesidad de buscar combustibles alternativos ante un agotamiento de las reservas mundiales de petróleo (pico petrolero). Por lo general buscan crearse un refugio de supervivencia apartado, donde puedan cultivar para ser autosuficientes.

Rawlesian - seguidores de James Wesley Rawles, preparándose en retiros de supervivencia rurales, fortificados y bien equipados.
Independientemente del grupo o facción de Prepper que hablemos, la mayoría cuenta con una serie de preparativos comunes. Entre ellos destacan la creación de un refugio, habitualmente remoto o subterráneo, y bien fortificado; la acumulación de alimentos no perecederos, agua y equipo de purificación del agua, ropa, medicamentos, semillas, leña y armas de caza y de defensa.

Desde sus orígenes, el movimiento survivalista no ha parado de crecer. Asociado en muchas ocasiones con extremismos y con actividades paramilitares, debido principalmente a las facciones de preppers que abogan por la preparación armada y el aprendizaje del uso de armas de fuego, en realidad el survivalismo es mucho más complejo. Un movimiento extendido en la actualidad por todo el mundo y compuesto por multitud de grupos y personas con creencias de todo tipo, con el nexo común de prepararse ante un eventual desastre.
El "fiasco" de las profecías mayas sobre el fin del mundo en 2012, que había supuesto un especial impulso para algunos grupos de survivalistas, no afectó especialmente a la popularidad del movimiento. El terremoto de Haití en 2010 o el gran terremoto de Japón en 2011 y el posterior Tsunami que afectó gravemente a la central nuclear de Fukushima ponen de manifiesto la vulnerabilidad de los seres humanos ante la fuerza de la naturaleza.

En 2012 se produjo una gran tormenta solar que, de haber impactado en la Tierra como sucedió en 1859 con el denominado Evento Carrington, habría afectado gravemente a las comunicaciones y los aparatos electrónicos de todo el planeta, llevándonos según los expertos a una especie de edad de piedra durante al menos cinco años.
Independientemente de las probabilidades o cuándo se podría producir, un gran colapso del sistema económico y social o un gran desastre natural que afecte al planeta de forma global, cambiaría radicalmente nuestra forma de vida. Si se llegara a producir el Apocalípsis, no hay duda de que los Preppers serían los mejores preparados para sobrevivir.